Estudiar en Japón

Como mencioné en Parte 1Estudiar en Japón es una valiosa oportunidad para muchas personas. En la Parte 2, me gustaría compartir tres razones más por las que vale la pena considerarlo.
1. Grandes oportunidades de empleo
Según El Japan TimesLa ratio empleo efectivo/solicitante se ha mantenido por encima de 1,25 desde 2023 y alcanzó 1,26 en marzo de 2025, lo que significa que hay 126 vacantes por cada 100 demandantes de empleo. Reuters cita las proyecciones del Recruit Works Institute, que advierten de un déficit de 3,4 millones de trabajadores para 2030 y de 11 millones para 2040. La escasez afecta a los sectores de las tecnologías de la información, la industria manufacturera, la sanidad, la construcción y el turismo, por lo que las puertas están abiertas de par en par a licenciados internacionales con las cualificaciones adecuadas. Lo mismo puede decirse de los empleados de cuello blanco y de los trabajadores manuales. Todas las empresas esperan contratar a trabajadores de alto rendimiento, pero lo cierto es que tienen dificultades para conseguirlos.
Al mismo tiempo, la inversión extranjera está en auge. JETRO informa de la existencia de más de 7.400 empresas extranjeras que operaban en Japón en 2023, de las cuales casi la mitad planeaban una mayor expansión. Una encuesta de seguimiento de 2024 mostró que alrededor del 49% de las más de 7.300 empresas encuestadas aumentaron sus ventas año tras año. Las entradas de IED en Japón alcanzaron la cifra récord de 50,5 billones de yenes a finales de 2023 (un 9,3% más), y el gobierno tiene como objetivo alcanzar los 100 billones de yenes en 2030. Este aumento significa que los licenciados que dominan el inglés y hablan japonés están muy solicitados en sectores en vías de globalización como las tecnologías de la información, las finanzas, las energías renovables y las ciencias de la vida, lo que ofrece grandes oportunidades de empleo y un rápido crecimiento profesional. Por mi propia experiencia, las empresas japonesas que antes se cerraban al mundo exterior están empezando a aceptar el talento global. Recientemente, Seven & i Holdings nombra por primera vez a un consejero delegado extranjero, Stephen Dacusy Nissan nombra nuevo consejero delegado al mexicano Iván Espinosa. Sin prisa pero sin pausa, los profesionales extranjeros ocupan puestos de responsabilidad en Japón.
2. Matrícula y coste de vida razonables
Las universidades nacionales de Japón cobran unos 535.800 yenes (≈ $3.500) al año en concepto de matrícula, una tasa que no ha cambiado en casi dos décadas. Incluso prestigiosas instituciones como la Universidad de Tokio y la Universidad de Kioto siguen esta tarifa. Los costes del primer año, incluidas las tasas de admisión, se mantienen por debajo de los 820.000 yenes ($7.200) en las universidades públicas. En comparación, la matrícula en las universidades de EE.UU. o el Reino Unido puede oscilar fácilmente entre los 1.400 y los 1.445.000 yenes anuales. Esto significa que estudiar en Japón puede costar un tercio o menos, sin comprometer la calidad. Incluso sin la ventaja de la debilidad del yen, estudiar en Japón sigue siendo muy asequible. Aunque las universidades privadas suelen cobrar alrededor de 1.000.000 de yenes al año, una cantidad superior a la de las universidades nacionales o públicas, el coste total sigue siendo bastante bajo en comparación con los países occidentales.
Aunque Tokio es conocida por su tamaño y su energía, la vida estudiantil es asequible. En todo Japón, los estudiantes internacionales gastan unos 105.000 yenes ($700/mes) de media, incluyendo alquiler, comida y otros gastos básicos. Incluso en Tokio, muchos estudiantes no superan los 120.000 yenes al mes. Además, los descuentos para estudiantes en el transporte, las cafeterías del campus y el asequible seguro médico (sólo 2.000 yenes al mes) ayudan a que tu presupuesto llegue más lejos.
Además, muchas universidades ofrecen exenciones de matrícula de hasta 100% para estudiantes internacionales, y existen cientos de programas de becas en todo el país.
3. Centro de Asia-Pacífico
La posición geográfica de Japón le sitúa en el mismo centro de Asia-Pacífico y a medio camino entre dos de las mayores economías del mundo. Desde Tokio, sólo se tardan 10 horas en llegar a Los Ángeles y unas 9 horas y 15 minutos a San Francisco. Por otro lado, se puede volar a Shanghai en sólo 3 horas y a Pekín en menos de 4 horas. Esto convierte a Japón no sólo en un centro mundial, sino también en una base muy conveniente para actividades académicas o profesionales tanto en Occidente como en Oriente.
Además, Japón está idealmente situado cerca de muchas de las economías más dinámicas y de más rápido crecimiento de Asia. Puede llegar a Delhi en aproximadamente 7,5 horas, a Bombay en 9 horas y a Yakarta en poco más de 7 horas. Ya sea para asistir a una conferencia regional, explorar oportunidades de prácticas o establecer contactos transfronterizos, estar basado en Japón le proporciona un acceso rápido y asequible a toda la región de Asia-Pacífico.
Y, lo que es más importante para los estudiantes internacionales, esta proximidad hace que sea mucho más fácil volver a casa durante las vacaciones largas, como las de verano o invierno. A diferencia de estudiar en Europa o Norteamérica, no tendrá que pasar más de 15 horas en tránsito ni enfrentarse a costosas escalas. Un vuelo directo suele significar menos tiempo en los aeropuertos y más tiempo con la familia, sin sacrificar el acceso a una de las regiones más apasionantes del mundo.